Cambiando de hemisferio.

Proyecto 365, dia 259

Dos días de acceso a Internet solo en intervalos por no-sé-qué reparaciones me han obligado a separarme un poco del Diario. Aunque mi espíritu y mis manos hayan estado tan inquietos en estos días como para permitirme siquiera un rato de lectura tranquila no me quejo: estoy produciendo –nunca mejor dicho- a manos llenas.
No son escritos los textos que doy a luz en estos días, sino sensoriales. No son inquietudes intelectuales las que me rodean, sino figuras y la posibilidad de realizarlas. Las ideas han dado paso a las imágenes, la perspicacia a los colores y el razonamiento a las tijeras.
Se siente bien cambiar de una mitad del cerebro a la otra, este furioso despertar del hemisferio derecho que llega imponiendo sus maneras, sus formas de hacer, sus intereses, su peculiar visión del mundo, que va dejando un rastro de creaciones a su paso. ¿Lo han probado?

Comentarios

  1. Pues verás... La idea de la razón como tijeras me gustó.

    Ahora que en cuanto a manualidades, creo que lo más complicado que he hecho son aviones de papel. Mis dibujos harían las delicias de Rorschach... también sirven. Últimamente he recuperado una antigua afición por la música; falta ver si el garfio lo permite...

    Ya se te extrañaba. Besos.

    ResponderEliminar
  2. Pelusita

    Ya venía yo, muy presta, a "echarle" al Halloween y a defender la festividad de muertos mexicana... y zas, castigo divino, ya no encontré el post respectivo.

    Beso fantasmal

    ResponderEliminar
  3. Si tomamos la mirada taoista, para estar completos necesitamos de las dos mitades, así que aplaudo la iniciativa aunque te lleve lejos de este sitio, porque es necesaria para el alma. Y sip, también lo he probado pero todavía no encuentro una manera de equilibrarlo en la vida cotidiana, sigo en la búsqueda.

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares