Barcelona, ciudad inagotable.

Llevo mas de un año caminando Barcelona y no he regresado a casa ni una sola vez sin haber encontrado algo nuevo. Siempre logra sorprenderme. ¿Se acuerdan que ayer les comenté que me iba de paseo? Pues la agenda que nos tenía preparada la ciudad, siempre diferente y mucho más rica que la idea que uno puede llevar preconcebida, resultó ser brillante.
Íbamos caminando por una calle por la que ya habíamos pasado mas de una vez y de pronto, como salida de la nada, al doblar una esquina nos encontramos con una enorme avenida desconocida para nosotros: el Paseo de Sant Joan. Tenía un largo paseo central –como los que abundan en esta ciudad pensada para el hombre- lleno de árboles, bancos para descansar, áreas de juegos infantiles y fuentes, bordeado por edificios de muy buena planta (de esos que solo de verlos uno intuye que se mantendrán en pie varios siglos) que no sé por qué me trajeron muy agradables remembranzas de mi Habana y hasta de ciertos lugares de Ciudad de México.
Por ahí seguimos, disfrutando de las vistas, cuando casi tropezamos con una tiendita rusa, pequeña pero ineludible. ¡Qué maravilla encontrarme de nuevo entre todos esos productos recién traídos de aquellas tierras! Pan negro, caviar, frascos de conservas, trigo, vodka, vinos, pescados secos… ¡Qué olores! Poco faltó para que pidiera una taza de té y me sentara a charlar entre bocados de buen chocolate ruso, como tantas tardes hiciera en casa de Sasha o de Irina…
Y cuando por fin tuvimos que abandonar aquel paseo y doblar por el Carrer de Aragó, una de las avenidas mas populosas de la ciudad, justo en el momento en que el ruido incesante de los coches comenzaba a molestarnos, nos hallamos frente a las puertas abiertas de una iglesia gótica que tampoco habíamos visto nunca, en medio de un barrio donde este estilo no es precisamente lo que mas abunda. ¿Cómo resistirse a semejante invitación, garantía de silencio, tranquilidad y buen arte –puras buenas impresiones para nuestros sentidos? Resultó ser la Parroquia de la Purísima Concepción, que nos cobijó un buen rato del frío, nos regaló un momento de recogimiento y hasta nos ayudó a recargar las baterías para seguir nuestro camino.
Aquí les dejo un par de fotos de esta iglesia para que también ustedes puedan disfrutar de una parte de la visita.


Comentarios

  1. Barcelona!!!
    El paseo que nos trajiste es el mejor regalo. Yo estuve solo 10 días en Barcelona y por supuesto, aunque eran agotadoras las caminatas, no pudimos conocer todo; regresaría a visitar todas las obras de Gaudí y a caminar por la Rambla, que aunque en aquel entonces a una amiga no le parecio agradable a mí me parece que tiene su encantó, siempre y cuando te cuides de las gitanas claro.
    Barcelona es el reflejo de que las ciudades son lo mío, me declaro fanatica del Centro Histórico de la ciudad de México, y a pesar de creer que lo conozco perfecto siempre me encuentro con sorpresas como la tiendita rusa que encontraste.
    Uf, ahora si me emocione, si nos tomaramos un cafesito con esto tendriamos platica para rato.
    Saludos Pelusita.

    ResponderEliminar
  2. Ah, esa tan desconocida Barcelona.

    No pude evitar sonreír cuando leí "hasta de ciertos lugares de Ciudad de México".

    No sabía que existiera "buen chocolate ruso"... pues para mí, el sabor que evoca Rusia es el de un vodka (nunca he sabido cómo se llamaba) que, hace algunos ayeres, un buen amigo trajo de allá y disfrutamos en la cómplice clandestinidad de la adolescencia.

    Gracias por esas invocaciones a la memoria. Besos.

    ResponderEliminar
  3. Me gustó tu paseo, se ve que disfrutas mucho el hacerlo.


    Un saludo Pelusina.

    ResponderEliminar
  4. Me alegra que lo disfrutaras!! aunque he tenido la suerte de vivir muchos años en Barcelona, a mi también me sorprende siempre. Un beso fuerte!

    ResponderEliminar
  5. NTQVCA:

    Las Ramblas son emblematicas en esta ciudad, es cierto, y tienen su encanto. Sobre todo al principio, cuando llegamos aqui, no nos cansabamos de caminar por ellas. A fin de cuentas, estabamos en 'Las Ramblas de Barcelona'!! Pero paso un poco de tiempo, llego el verano, y llego la primera oleada de turistas que lo inundo todo. Claro que nosotros tambien somos turistas, pero yo no disfruto un lugar con tanta gente, ni aunque sean nativos. Huyo de las aglomeraciones! Asi que poco a poco le fui perdiendo el gusto a pasear por Las Ramblas. He ido descubriendo otros lugares, como unas segundas Ramblas, a solo una cuadra de las famosas que nos ocupan hoy, y que son mucho mas tranquilas y comodas para pasear, o como el Paseo de Sant Joan del que hable en este post... Por las otras, por las famosas "Ramblas de Barcelona", evito un poco pasar...

    Cuando nos tomamos el cafecito?
    Besos!

    ResponderEliminar
  6. Mi querido Ivanius:

    Es bueno tenerte de vuelta por aca.

    Sabes que yo encuentro la Habana muy parecida a España. Por lo menos a ciertos lugares que conozco, algunas zonas de Madrid y algunas de Barcelona, incluso hasta en Ibiza he encontrado similitudes. Son una especie de vision futurista de lo que La Habana seria hoy dia si la gente hubiera tenido mas posibilidades de ocuparse de su ciudad (eso es otro tema).
    Sin embargo, poco encuentro de la Ciudad de Mexico que yo conoci por aca. Y me resulta raro, teniendo en cuenta que tanto Mexico como Cuba cuentan con España en sus raices. Quizas tenga que ver con que en Cuba, a diferencia de Mex., los indios desaparecieron del todo y lo que existe hoy dia nacio puramente de lo español. Por eso me resulta llamativo cuando un lugar de aca me trae reminiscencias de tu tierra.

    El chocolate ruso, amigo, es uno de los mas sabrosos que he probado. Es 'muy ruso', es decir, de sabor fuerte, de textura ruda, pero delicioso. El acompañante perfecto para el te con frutas rojas que tanto gusta en esas frias tierras. Claro, nunca faltara en una mesa de te ruso, unos buenos dulces caseros, con mucha harina, manzanas... Si sigo por este camino voy a engordar unos kilos solo de pensarlo!
    En Rusia hay mucho mas que vodka, aunque para mi tambien ese hubiera sido el elemento distintivo durante un tiempo. El caviar, sobre todo montado en buen pan negro de centeno con mantequilla es bocado de dioses. Y los pescados secos, tambien acompañantes del vodka, y los embutidos, y el trigo sarraceno con mantequilla derretida.... Y las confituras!!!
    Y bueno, que mejor voy terminando aqui... Gracias a ti por estas ultimas remembranzas!
    Besos

    ResponderEliminar
  7. Mi Malque:

    Pasear es uno de los placeres que mas disfruto. Viajar, descubrir lugares nuevos, tener un atisbo en la vida de gentes desconocidas por completo, tomar un cafecito en una mesita al aire libre... Ahhhh!
    Ya me quiero ir de nuevo de paseo!
    Besos

    ResponderEliminar
  8. Sonia:

    Lo vengo disfrutando hace mas de un año y estoy segura que pasara mucho tiempo antes de que me aburra de esta ciudad, si es que alguna vez llego a aburrirme.

    Un beso!
    (Por cierto, en el blog de manualidades no suelo responder los comentarios, pero siempre los leo con mucho gusto. Me gustaria ver las bellezas que creas con tu niña los fines de semana!)

    ResponderEliminar

Publicar un comentario

Entradas populares